martes, 22 de marzo de 2022

SI ME ENAMORO EN UN HOSPITAL, ES UN AMOR NOSOCOMIAL?


La guía Científica

“COMO MANTENERTE INMUNE A LOS AMORIOS EN TU HOSPITAL”  basada en hechos y experiencias reales por décadas y décadas en enfermeras veteranas, dice: el amor nosocomial es semejante a una sepsis por KLEBSIELLA KPC  o STREPTOCOCUS AUREUS, dañino y  letal, ¡nada recomendado!  ¿Y es que a quien se le recomienda una infección o sepsis? Es que tu misma te lo buscas, aunque suene crudo y frio, así es.

Si el organismo lleva el nombre de PIRUJANO sepsis total, si lleva el nombre de INTENSIVISTA, mucho cuidado, muerte cerebral y así etc etc etc  ( hey esto es broma no lo tomen en serio ) 

La pandemia para mí no solo trajo muerte y desgracias, sino también trajo consigo, nuevos comienzos, retos y sobre todo ilusiones, que pronto nos llevarían a una historia desbordante de emociones y cambios. Ya no hay vuelta atrás, todos los obstáculos que había tenido no solo en los últimos meses sino también desde que había nacido, me habían convertido en una persona muy fuerte o al menos eso era lo que yo creía hasta que lo conocí.

 De pronto allí estaba con la mirada fija y otras veces perdida. Un turno más de aquellos que ya  estábamos acostumbrándonos, salir a almorzar no sin antes ducharnos para supuestamente sacarnos algún virus de covid19 que pudiera quedarse en nosotros, pasar a un área limpia donde almorzábamos, y allí, justamente allí estaba él, sentado en un costado mirando su celular atentamente como si tuviera la conversación de su vida, y fue entonces donde esta historia empieza, cuando me miró y  toco mi brazo (quería revisarlo porque traía una enorme herida) y como esto no es una novela los detalles los guardaré para mi ☺ Por lo pronto puedo decir que fueron los mejores meses que pude tener en una pandemia de mierda que consumía tus ganas, tus ánimos y toda de ti, pero allí estábamos los dos, con dudas, con miedos, con todo lo que no habíamos curado, pero con ganas de darnos la oportunidad que nos merecíamos, es que habíamos pasado por muchas situaciones antes de coincidir, y lo arriesgamos y con todo ello supimos acompañarnos, querernos y cuidarnos, éramos polos opuestos, pero fuimos fuego y electricidad que al estar juntos saltaban chispas….chispas en todo los sentidos, e incluso la pasión fue más fuerte que el orgullo, pero por muchas diferencias que acecharon lo nuestro, y como todo tiene su final, llego el momento de seguir nuestros caminos por separado, este fue el amor del cual te despojas sin odio y sin rencores y que por cuestiones de la vida, del destino no pudo ser, pero fue el amor más bonito que a mis 33 años en ese entonces pude y tuve el privilegio de tener.  ¡¡ joder!! Como hecho de menos aquellos momentos.

Está claro que hay personas que pasan por tu vida para enseñarte todo lo que no hay que hacer, y él era uno de ellos, de esos hombres que sin que apenas te des cuenta te sacuden entera y te mueven los cimientos, como si fuesen un terremoto, pero esta vez era a mí a quien le tocaba rebuscar entre los escombros.

Pensaba que a esta edad ya no debería doler tanto, es mas no debería doler, pero me equivoque, en los días de soledad en mi apartamento aprendí que hay un momento en la vida en que la felicidad se reduce a las cosas y momentos que te proporcionan paz, me la jugué a todo o nada cuando hace dos años solo era un muro grande de frialdad y sensatez que con el tiempo se volvió en una maraña de sentimientos desbordantes de ternura y calidez o al menos es lo que yo sentía gracias a él.

¡¡Así que, si sobrevivir quieres, dejar de fijarte en un personal de salud debes¡¡¡nuestros tiempos están regidos por guardias, muchas guardias y mucho estrés 😊

Hay mil historias que entrelazan nuestras vidas, pero esta claro que las mas significativas son las que marcan un antes y un después en tu vida, hoy con mis 35 años puedo decir que, nunca había llorado, reído, deseado plenamente y disfrutado tanto de alguien como lo hice en ese momento🙂

 

                                                                                              Fin.

 

 

el comienzo

EL COMIENZO

Mi infancia fue como la de cualquier niña de los 80’ entre el barrio y los amiguitos, los juegos épicos: mata gente, carambola, salta la...